El ámbar del Báltico es una resina fósil producida por los árboles coníferos de la región del Báltico hace millones de años. Este proceso de fosilización implica la polimerización y maduración de la resina con el tiempo, bajo la presión geológica y el calor. El ámbar se distingue por su composición química, principalmente compuesta por compuestos orgánicos como terpenos e hidrocarburos.
Físicamente, el ámbar báltico es generalmente translúcido a opaco, con una gama de colores que van desde el amarillo claro hasta el marrón oscuro, a veces con tonos rojos o verdes. Su claridad y color están influenciados por varios factores, incluyendo inclusiones orgánicas, impurezas minerales y el grado de fosilización.